Estamos presenciando una auténtica revolución en la gestión del agua, impulsada por el crecimiento exponencial de los datos y los software predictivos. La revolución consiste en una toma de decisiones más efectiva al convertir esos datos en información valiosa. A pesar de que esta transformación ya es evidente en el suministro de agua, especialmente en operaciones críticas, los sistemas de tratamiento de aguas residuales han experimentado un progreso más lento. La paradoja radica en que la red de saneamiento es precisamente el área donde las oportunidades de mejorar la eficiencia, sostenibilidad y gestión de riesgos mediante el análisis de datos son más significativas.
Descubre más sobre lo que piensa Ramón Dolz, nuestro director para España y LATAM en la revista iAgua.